REPÚBLICA ORIENTAL DEL URUGUAY
CÁMARA DE SENADORES
Montevideo, 19 de julio de 2016
De acuerdo con lo resuelto por el Senado de la República, se remite versión taquigráfica de las palabras pronunciadas por el señor Senador Carlos Camy y posterior intervención de varios señores Senadores, en sesión de fecha 13 de julio del año en curso, relacionada con los 70 años de la fundación de la Organización de Fútbol del Interior (OFI), con destino a las 61 Ligas y a las 4 Confederaciones afiliadas.
Saludo a usted con mi mayor consideración.
JOSÉ PEDRO MONTERO RAÚL SENDIC
SEÑOR PRESIDENTE.- El Senado ingresa al orden del día con la consideración del asunto que figura en primer término: «Exposición del señor Senador Carlos Camy, de acuerdo con lo previsto en el artículo 171 del Reglamento de la Cámara de Senadores, por el término de quince minutos, sobre el tema “70 años de fundación de la Organización de Fútbol del Interior (OFI)”».
Tiene la palabra el señor senador Camy.
SEÑOR CAMY.- Señor Presidente: en primer término, agradezco al Senado de la República por la disposición de acceder a lo solicitado a fin de que podamos exponer, en el día de hoy, sobre lo que consideramos un hecho muy importante. Me refiero a la conmemoración, precisamente en el día de mañana, de los setenta años de la creación de la Organización de Fútbol del Interior –OFI–, entidad rectora del fútbol del interior del país, del fútbol de tierra adentro, del fútbol chacarero, como lo ha definido algún periodista capitalino.
Queremos agradecer la presencia de los integrantes del Consejo Ejecutivo de la OFI junto a su Presidente, el señor Gustavo Bares, y también, de manera muy especial, la presencia del Subsecretario de la Secretaría Nacional de Deporte, doctor Alfredo Etchandy.
Me quiero referir a este tema, señor presidente, desde la perspectiva de alguien del interior del país, que seguramente aquilata en una dimensión muy particular el significativo hecho de que una organización tan importante como esta conmemore setenta años de su creación.
La Organización del Fútbol del Interior es la entidad que más ha contribuido, y de manera ininterrumpida, a la formación y a la educación deportiva de niños y jóvenes, de deportistas, de árbitros, de entrenadores, en un ámbito de actividad deportiva amateur. Una institución de estas características no tiene par en el país.
Esta asociación civil sin fines de lucro fue fundada el 14 de julio de 1946, paradójicamente en la ciudad de Montevideo, capital del país, y se integró por clubes de fútbol amateur de todo el país, excepto del departamento de Montevideo, que manifestaron la voluntad de organizarse a través de ligas para afiliarse. A su vez, las ligas se agrupan en sectores –el sector del interior y el sector de la capital, en cada uno de los dieciocho departamentos– y, finalmente, se constituyen en cuatro confederaciones: la confederación de fútbol del sur, la del este, la del litoral y la del litoral norte.
Según la encuesta de la OFI del año 2015, existen 615 clubes afiliados, 82 de fútbol femenino, 707 árbitros –hombres y mujeres–, 30.000 menores de dieciocho años fichados y compitiendo oficialmente, en el marco de los 140.000 jugadores que todos los fines de semana justifican la existencia de la OFI.
En sus estatutos establece que asumirá y propenderá a los siguientes fines y cometidos: fomentar el progreso y el desarrollo del fútbol en los departamentos del interior de la República Oriental del Uruguay, promoviendo la unidad del fútbol del interior del país como medio de acercamiento y conjunción de fuerzas.
Señor presidente: el escritor Eduardo Galeano, en su libro El fútbol a sol y sombra, reflexionaba y dice: «No tengo nada de original porque, como se sabe, en mi país las maternidades hacen un ruido infernal porque todos los bebés se asoman al mundo entre las piernas de la madre gritando gol. Yo también grité gol para no ser menos y como todos quise ser jugador de fútbol». Creo que esta frase, esta reflexión, encierra toda una definición cultural nacional. El fútbol uruguayo, además de ser uno de los máximos representantes del fútbol mundial y de su historia, en nuestro país representa más que un deporte; es, en definitiva, una de las expresiones culturales más distintivas del ser nacional.
El propio Galeano decía que el fútbol es la única religión que no tiene ateos. En nuestro país el fútbol es casi una suerte de definición religiosa; es una identificación que nos representa como nación. Y, felizmente, en los últimos años hemos visto, vivido y asistido a convocatorias populares espontáneas en el país que mi generación –al menos– no conocía.
Estamos hablando de una organización que rige el más popular de los deportes en más del 95% del territorio nacional. El fútbol del interior, señor presidente, constituye la máxima expresión deportiva y social para poco más de la mitad de la población uruguaya y es, sin duda, una de las tradiciones más arraigadas. En cientos de pequeños pueblos, villas, villorrios y parajes es la única actividad deportiva que se practica. Se trata de un deporte, pero también es una expresión que se conjuga en el plano social, cultural y educativo. Es una actividad que enaltece.
Instituciones existentes a principios del siglo xx y que aún están vigentes, representadas por clubes más que centenarios, son una referencia deportiva, social, cultural y económica en nuestro interior profundo, lo que habla del fuerte vínculo que lograron establecer con la sociedad. Creo que las instituciones deportivas del interior del país –y lo digo con respeto o al menos sin aludir a las que no integran esta definición– cuentan con más posibilidades de cumplir fielmente con esos fines sociales y solidarios. Me refiero especialmente a las organizaciones de fútbol, que en su seno desarrollan actividades que no son profesionales y, además, cumplen de manera cabal con la obra social, deportiva y cultural definida entre sus objetivos.
Humildemente, pretendemos que al conmemorarse los 70 años de creación de la OFI, el Senado de la república realice un homenaje a esta organización que nació para agrupar a todos esos clubes del interior a los que nos referimos. Como decía, se creó para reunir a esos clubes que iniciaron la práctica del deporte a principios del siglo pasado a nivel local y luego, progresiva y tímidamente comenzaron a realizar experiencias de intercambio interdepartamental, hasta que en 1920 efectuaron la primera competencia regional. En aquel tiempo la Asociación Uruguaya de Fútbol tenía competencias jurídicas sobre todo el territorio del país, pero no atendía a ese interior y concentraba el fútbol de élite en la capital.
A 70 años de esa convocatoria para conformar y regular el ejercicio del deporte y la práctica del fútbol –70 años que se cumplen, precisamente, en el día de mañana– la OFI es la red deportiva más grande que existe en el Uruguay. En los lugares más recónditos, en el interior profundo de nuestro país, hay una referencia institucional que pregona y organiza los valores del deporte, con clubes que actúan como agentes contenedores de los problemas de los jóvenes, a través del trabajo silencioso, anónimo, honorario, sacrificado y desconocido de cientos de dirigentes y entrenadores que, con frecuencia, conocen más que sus propias familias los problemas de muchos de esos muchachos. Esos clubes y esos dirigentes brindan a la comunidad innumerables aportes que van más allá de lo deportivo, como por ejemplo el apoyo en situaciones críticas o cuando hay un contingencia climática. Las instalaciones deportivas se ofrecen, en muchas oportunidades, como locales transitorios de enseñanza y, a veces, también brindan alimentación básica y equipamiento deportivo a jugadores de bajos recursos.
En definitiva, estas instituciones, estos clubes que conforman la OFI –que son 615; 82 de fútbol femenino– son verdaderos agentes transformadores de la sociedad en la que están inmersos y contribuyen enormemente a crear vínculos de socialización y de educación en los pueblos, sustentando económicamente esta actividad con recursos propios y, reitero, con el esfuerzo y sacrificio de cientos de dirigentes que, anónimamente, son los grandes hacedores de todo esto.
Quiero subrayar –esto lo hablamos con el doctor Etchandy en una charla muy provechosa– que desde hace 16 años, demostrando un fuerte compromiso con la equidad de género, la OFI ha incorporado las competencias de fútbol femenino a través de la planificación deportiva. Viene trabajando de forma organizada en el desarrollo de esta disciplina, e incentiva a las instituciones a incluir a la mujer en el deporte, en el arbitraje y también como entrenadoras y dirigentes.
Como decíamos, de sus más de 600 clubes, 82 practican oficialmente, a nivel de competencia, el fútbol femenino, y existen más de 3000 fichajes de jugadoras de ese deporte.
Señor presidente: el censo del 2004 arrojaba que de 1:800.000 uruguayos hombres, 302.000 pertenecían a la franja etaria de 10 a 30 años –repito: de los 1:800.000 habitantes hombres, 302.000 tenían entre 10 y 30 años–, de los cuales 140.000 eran jugadores fichados que participan de las casi 10.000 competencias que por año organiza OFI, la entidad que rige este deporte en el interior. Esto muestra la dimensión de este organismo, de esta institución a la que hoy el Senado de la república pretende homenajear. Se estima que, de manera directa o indirecta y teniendo en cuenta el relacionamiento integral que supone organizar estas competencias, 350.000 personas por fin de semana giran en cientos de lugares del interior del país en torno a la práctica del fútbol.
Hay otro aspecto a resaltar, que seguramente nos convoca a todos: el aporte a la celeste. Desde principios del siglo xx, jugadores formados en clubes del interior del país han llegado a la capital para conformar los planteles de los clubes profesionales e integrar las selecciones nacionales. Este aporte ha ido creciendo desde ese entonces, de forma sostenida, hasta la actualidad, en que algo más del 50% de los jugadores que integran las representaciones de Uruguay ha sido formado en las canteras del fútbol del interior del país. Podemos mencionar a José Leandro Andrade, de Salto; a René Tito Borjas, de Lavalleja; a Zoilo Saldombide, de Canelones, y a Álvaro Gestido, de Treinta y Tres, que integraron las selecciones campeonas de América, olímpica y del mundo de 1924, 1928 y 1930. En la actualidad, podemos citar a Diego Lugano, José María Giménez y Christian Stuani, de Canelones; a Nicolás Lodeiro, Egidio Arévalo Ríos y Walter Gargano, de Paysandú; a Edinson Cavani y Luis Suárez, de Salto; a Diego Godín y Cristian Rodríguez, de Colonia, y a tantos otros del fútbol del interior, cuyos clubes trabajaron con ellos en categorías formativas a partir de los 13 años, para entregar su talento y capacidad en beneficio de nuestra querida celeste.
Señor presidente: queremos reconocer en esta instancia, de manera particular, el trabajo de la dirigencia de la OFI en todo este tiempo; queremos reconocer a su actual comisión directiva, pero también a los 18 presidentes que en estos 70 años han contribuido a conformar esta realidad, desde el doctor Isidoro Leirana, que presidió el congreso fundacional del 14 de julio de 1946, hasta el doctor Diego Landa, que fue el primer presidente. Además, queremos reconocer a dos expresidentes que fueron miembros de esta casa: el profesor Carlos W. Cigliutti –que fue por 12 años presidente de OFI– y también a nuestro coterráneo, el doctor Gustavo Cersósimo.
Con sencillez y humildad reiteramos nuestro agradecimiento al Cuerpo por permitirnos expresar estas palabras. Hemos querido, desde nuestra máxima convicción, hacer este homenaje al fútbol del interior, pero fundamentalmente a cada una de las instituciones que apuestan a la conjugación social y al compromiso con el desarrollo –en todos los planos– de pequeños pueblos y de lugares muy distantes de las grandes ciudades. Eso es lo que estas instituciones han hecho a través de estos 70 años, organizando ese deporte.
Quiero referirme al fútbol que no es de contratos multimillonarios, que no comprende los litigios escondidos detrás de cifras de muchos ceros a la derecha; quiero referirme al fútbol que nos identifica y del que, como bien ha señalado Galeano, todos somos parte y es lo que nos distingue en nuestra definición de uruguayos; quiero referirme al fútbol del campito, al de las instituciones que realizan un esfuerzo para poder pagar la luz, esa que les seguimos cobrando con IVA, problema que no hemos podido solucionar a través de los distintos gobiernos y décadas. Deseo homenajear a esas instituciones deportivas que, al influjo del esfuerzo de hombres y mujeres que trabajan honorariamente y con su propio peculio, sostienen lo que socialmente es la expresión más importante que tiene el interior del país. Agradezco, a través de la OFI, a todas esas instituciones, a todo ese esfuerzo.
Hago este reconocimiento en tiempos en que la FIFA mandata, en el mundo, a la unidad nacional del fútbol. Quiero expresar que, en Uruguay, la Organización del Fútbol del Interior es la más importante red deportiva y la organización más grande de este deporte –en cantidad– en nuestro territorio.
Termino mis palabras, señor presidente, citando una frase de Galeano del libro a que refería. Allí pregunta en qué se parece el fútbol a Dios, y responde: «En la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales».
Seguramente haya gente que no comprenda la dimensión de lo que hoy hemos traído a consideración del Cuerpo, en la pretensión de que tenga el homenaje más importante en la casa que nos representa a todos los uruguayos. Estoy absolutamente convencido de que hoy no hablamos simplemente de 70 años de una organización más –que, por cierto, en un país tan joven no es poco–, sino de una de las expresiones deportivas, sociales y culturales más arraigadas en nuestro pueblo y que más nos identifica a los uruguayos.
Muchísimas gracias, y ¡muy feliz cumpleaños a la OFI!
Gracias, señor presidente.
(Aplausos en la sala y en la barra).
SEÑOR PRESIDENTE.- Antes de continuar, quiero agradecer la presencia de los directivos de OFI que están en la barra, de los representantes de las confederaciones, de los representantes de los clubes, del señor Alfredo Etchandy que integra la Secretaría Nacional del Deporte y del Director de la Administración Nacional de Correos, doctor Fernando Saralegui.
SEÑOR PARDIÑAS.- Pido la palabra.
SEÑOR PRESIDENTE.- Tiene la palabra el señor senador.
SEÑOR PARDIÑAS.- Gracias, señor presidente.
En primer lugar, en nombre de nuestra fuerza política quiero adherir a esta iniciativa del señor Senador Camy, de tributar un homenaje a la Organización del Fútbol del Interior al conmemorarse los 70 años de su fundación. Y adherimos a ella porque nuestra nación se caracteriza por ese sentimiento popular de apego al fútbol. Por eso, a pesar de ser un pequeño país fuimos de los primeros en lograr uno de los principales triunfos en el fútbol en el plano internacional. Repito, es el deporte popular por excelencia, que a través de organizaciones sociales, barriales y comunitarias logró estructurar espacios de participación y de competencia. Podemos decir que, en definitiva, está en la esencia de los deportistas que su capacidad, su rendimiento y enamoramiento por esta disciplina también se plasmen en las competencias.
La Organización del Fútbol del Interior surge como una necesidad de armar, orquestar y armonizar eso que fue surgiendo en las diferentes ciudades y departamentos del país, me refiero a las ligas –como se las denominó históricamente– que organizaban los campeonatos y reconocían a los clubes que existían. Luego se fue pasando a instancias de mayor complejidad, justamente, con el surgimiento de la OFI. Así, se organizaron competencias internas entre las capitales departamentales, entre los departamentos; se organizaron competencias de las llamadas selecciones departamentales del interior del país y de los clubes campeones de cada departamento que desarrollaron la actividad a nivel nacional. Eso fue posible por la OFI, porque los participantes en ese proceso se dieron cuenta de que debía haber una organización que los nucleara y trabajara en ello.
Nosotros tuvimos la rica experiencia de haber sido miembros de la mesa de la Confederación de Fútbol del Este en representación de nuestro departamento, Cerro Largo, durante dos ejercicios. Ese departamento fue uno de los que forjó identidad organizativa en la OFI, primero por participar en la confederación del este y, después, porque gracias al entendimiento entre Cerro Largo, Tacuarembó y Rivera, se logró conformar la confederación del noreste. Luego, la posterior evolución de la estructura orgánica lleva a la existencia de las cuatro confederaciones señaladas por el señor Senador Camy.
Por lo tanto, hablar de la OFI es hablar de la organización del fútbol, algo tan necesario, no solo para transitar el territorio, sino para poder armar la infraestructura y los recursos que dieron lugar a la integración que hoy nos permite hablar de los campeonatos. Lo digo porque hablar de los campeonatos de la OFI es hablar de una integración en todo el territorio del país, exceptuando la capital nacional que, sin duda, es el asentamiento del fútbol profesional.
Hablar del fútbol del interior en el Uruguay de hoy, ya no es hablar solamente de la OFI porque también a nivel del fútbol profesional se da la integración, aunque tal vez no sea de la envergadura o magnitud que algunos quisiéramos que tuviera el fútbol en nuestro país. Lo cierto es que hoy, a nivel del fútbol profesional existe integración. En definitiva, creo que es el resultado de las acciones y de los ejemplos organizativos, así como de trabajo, que se han ido generando en el marco de la OFI. Es buena la experiencia de organizar clubes y selecciones para viajar, competir y estar presentes en acciones de integración, incluso a nivel regional, porque la OFI integra desde hace muchos años, junto a las ligas paraguayas, una competencia internacional que no busca competir por una copa, sino integrar a dos naciones hermanas en la historia de la región.
La experiencia de la OFI fue muy necesaria para que surgieran estos embriones de clubes que, desde el interior, aspiraban y aspiran integrar las competencias de fútbol profesional. Por tanto, también hay que rescatar que la promoción y el crecimiento del valor que tiene el fútbol en la formación y educación en el deporte es mérito de este proceso de integración generado por la OFI durante 70 años.
Quiero destacar, señor Presidente, una actividad que tiene fuerte presencia en la OFI, como es el fútbol femenino. El fútbol femenino se ha venido desarrollando y crece en la adhesión, no solo de las mujeres que participan de él, sino de la sociedad, que respalda y acompaña a las mujeres que desarrollan esta actividad deportiva. La OFI tiene, entre sus acciones, programas específicos para el fútbol femenino y creo que en momentos en que el país quiere seguir afianzando –sobre todo, desde las políticas públicas– las políticas de integración de género, lo que está haciendo la organización del fútbol del interior para integrar el fútbol femenino es un buen ejemplo como política de género. Así pues, no solo se ha trabajado, sino que se está en la realización del 14º Campeonato Nacional de Fútbol Femenino. Asimismo, se ha trabajado en la promoción de la consolidación de estos espacios. En este momento la OFI está llevando adelante un programa de apoyo a los clubes femeninos mediante la entrega de indumentaria deportiva, por lo cual cientos de deportistas cuentan con ella para poder practicar el fútbol con mayor dedicación y confort.
Al conmemorarse setenta años de la OFI también es necesario tener presente que hay una política de integración de género llevada adelante por una organización que no siempre es el centro de atención de las políticas deportivas en este país, sobre todo, en lo que trasciende. No hay duda de que trasciende mucho más que se ha inaugurado un estadio en la conjunción de las rutas n.os 8 y 101, que el hecho de que finalice un campeonato de OFI y salga campeona determinado club del interior, como ocurrió recientemente cuando salió campeón de clubes nacionales una institución que pertenece a una ciudad del interior del país que no es capital de departamento. O sea que en aquellos lugares más pequeños también hay excelentes expresiones deportivas que son fruto de estas políticas que se desarrollan desde estas organizaciones.
También quiero destacar que hoy, desde la OFI, se lleva adelante un proyecto: el programa institucional «Avanza» para el desarrollo de infraestructura deportiva y para la capacitación y formación de los recursos humanos que trabajan en el ámbito deportivo del fútbol. Sin duda alguna, esto tuvo un apalancamiento importante por parte del Parlamento nacional en la Ley n.º 18833, que si bien declara de interés nacional el deporte, a través de herramientas que están incluidas en la norma fomenta la posibilidad de financiamiento de las actividades deportivas, fundamentalmente aquellas relacionadas con los sectores juveniles y el fútbol infantil y del interior. Y la OFI ha encarado con mucha seriedad el poder nutrirse de las herramientas que genera esta ley para ser parte del financiamiento del programa «Avanza» y obtener así el aporte y el apoyo de diferentes actores de nuestra sociedad para el bien del deporte.
Setenta años de historia del fútbol del interior nos lleva a hablar, también, de las glorias del fútbol del Uruguay, así como de esta construcción de identidad que pasa por ir plasmando, en la práctica del fútbol como deporte, algunos de los elementos políticos que es necesario seguir profundizando y desarrollando en el plano administrativo y político de nuestro país, como la integración de nuestro territorio; la integración de distintas capitales departamentales con las localidades del interior y la integración de la actividad del interior del país con toda la actividad de nuestra nación. La idea fundamental es que, desde estas prácticas deportivas, desde los campitos de las escuelas rurales hasta el estadio Centenario, podamos tener una identidad como fútbol uruguayo que no solamente nos dé triunfos, sino también ciudadanas y ciudadanos mejor formados y más comprometidos con el bienestar de nuestro país y de nuestra gente.
Finalmente, en nombre de su P residente, señor Gustavo Bares –presente en la sesión–, queremos trasladar a todo el cuerpo directivo de OFI y de las diferentes confederaciones, nuestras felicitaciones por el 70 aniversario y, a través de la figura del doctor Etchandy –presidente de la Secretaría Nacional del Deporte–, reafirmar el compromiso para seguir trabajando por un deporte integrado que identifique a nuestro país y a nuestra nación.
Muchas gracias.
(Aplausos en la sala y en la barra).
SEÑOR COUTINHO.- Pido la palabra.
SEÑOR PRESIDENTE.- Tiene la palabra el señor Senador.
SEÑOR COUTINHO.- Señor Presidente: queremos agradecer la presencia de todas las autoridades de OFI. No hace mucho tiempo tuvimos la oportunidad de estar en su lindo edificio, representando a nuestra querida institución del departamento de Salto, que –dicho sea de paso– no tuvo un buen torneo. De todos modos, realmente fue un placer estar allí compartiendo e interiorizándonos de tantas cosas. Asimismo, queremos agradecer y felicitar a ese dirigente del interior que para estar hoy, acá, cubre –una y otra vez– cada uno de sus costos.
Agradecemos también la iniciativa y felicitamos al señor senador Camy –realmente compartimos sus palabras, tan sentidas–, un hombre del interior, futbolero y con el que tantas veces hemos conversado sobre estos temas, porque nos parece muy bueno estar celebrando el 70 aniversario. También compartimos las palabras del señor Senador Pardiñas que se refirió a los avances, pero nosotros también queremos hablar de lo que falta.
Desde el Partido Colorado queremos reconocer, homenajear, felicitar y compartir hoy el pasado, presente y futuro de la Organización del Fútbol del Interior, en un nuevo aniversario de su fundación.
Un congreso convocado por la Liga de Paysandú para el 13 y 14 de julio de 1946 en Montevideo, dio paso a la OFI, que actualmente tiene jurisdicción en los dieciocho departamentos del interior del país. Aquella convocatoria nacía del sentimiento de todos los dirigentes del fútbol del interior. Era un sentimiento de autonomía, de lucha por la igualdad con la capital ya que, en muchos casos –y no tan distintos al de hoy–, se veían perjudicados por la organización del fútbol profesional, que antes de 1946 también atendía el fútbol del interior. En aquel momento –y para intentar calmar un poco los ánimos–, se creó un consejo permanente para conducir el fútbol del interior. Parece que fue ayer, y no porque el tiempo pase tan rápido, sino porque a pesar de los esfuerzos y de que hoy existe un régimen de transferencias entre ambas asociaciones, hay mucho trabajo y muchas cosas por seguir mejorando en ese sentido.
Cuenta la historia que dos años antes de ese congreso del 13 y 14 de julio de 1946 –concretamente, en enero de 1944–, se reunieron en San José preocupados por las transferencias de jugadores del interior a la capital. En ese congreso nació la lucha colectiva de todas las ligas afiliadas, la que terminó dos años después con el nacimiento de la Organización del Fútbol del Interior que hoy tiene su autonomía, cuenta con miembros que se eligen cada tres años y, en todo sentido, hoy representa a todo el interior del país. Excepto Colonia, el resto de los departamentos tienen dos sectores: el de la capital y el del interior y todos organizan sus propios campeonatos.
Son 35 sectores los que eligen a las autoridades y le dan autonomía; juntos nuclean a casi todo un país que, como bien se dijo acá, se distribuye también en regiones o en cuatro confederaciones que también tienen sus mesas de representantes.
Hoy estamos conmemorando setenta años de esta OFI que cuenta con más de 600 clubes afiliados –todos en competencia–, 61 ligas, 35 sectores, 4 confederaciones y más de 100.000 jugadores, 35.000 de los cuales tienen entre 13 y 18 años.
Hoy la OFI es, también, la lista de futbolistas del interior que llegaron a representaciones y a selecciones uruguayas directamente de clubes del interior. Todo esto sirve para apreciar la magnitud de lo que significa la organización, el esfuerzo y orgullo de todos estos dirigentes en la cancha, así como también la representatividad futbolística a que se refirió muy bien el señor senador Camy. A esta representatividad le agregaría algunos nombres más, de destaque, porque si hablamos de Godín, hablamos del mejor zaguero del mundo. ¿Y si hablamos de Cavani y de Suárez? Bueno, en ese caso nos referimos a dos de los cinco mejores delanteros del mundo. Algunos van a compartir estas afirmaciones. Todos ellos han salido del esfuerzo y el sacrificio de ese dirigente honorario que fue capaz de organizar, de juntar y encargarse del vestuario, generando en cada rincón del interior del país la oportunidad, la posibilidad para los que llegan, y también para los miles y miles que no llegan, pero que están trabajando en el deporte, que toman ese escenario y son los futuros dirigentes de sus clubes y de la OFI.
Todos los gobernantes, los de ayer y los de hoy, seguimos teniendo una deuda histórica con la OFI, y la seguimos teniendo porque desde la capital, a la hora de la distribución, continúa la desigualdad. Para demostrar esto solamente necesitamos mirar los números de la Secretaría Nacional del Deporte y de las empresas públicas. Allí podremos notar esas diferencias ya que los números no tienen dos lecturas, y hay un rubro y un recurso para la capital y sigue habiendo uno, mucho menor, para el interior.
En este homenaje, y como principal reconocimiento a estos setenta años, desde la bancada del Partido Colorado queremos felicitarlos, reconocer su trabajo, desearles un feliz aniversario y manifestarles nuestro agradecimiento y nuestro compromiso, porque sus objetivos también son y serán los nuestros, en cuanto a que vamos a ir por ellos.
¡Feliz aniversario! ¡Feliz cumpleaños para la OFI!
Muchas gracias.
(Aplausos en la sala y en la barra).
SEÑOR CASTAINGDEBAT.- Pido la palabra.
SEÑOR PRESIDENTE.- Tiene la palabra el señor Senador.
SEÑOR CASTAINGDEBAT.- Señor Presidente: no pensábamos hacer uso de la palabra porque íbamos a sentirnos muy representados por lo manifestado por el señor Senador Camy y porque, a diferencia de él, no estuvimos un mes preparando nuestra exposición y recabando información para hablar de la OFI. Sin embargo, mientras lo escuchábamos resultó inevitable que nos vinieran a la mente una cantidad de recuerdos dado que capaz que con catorce años ya jugábamos en algún cuadro de la OFI y luego, con el correr del tiempo, pasamos por todo. Lo único que nos faltó fue ser directivos de la OFI, aunque las vueltas de la vida nos llevaron a que ocupáramos cargos en la Asociación Uruguaya de Fútbol, pero no en la Organización del Fútbol del Interior.
El señor Senador Camy le dio un sesgo muy maragato a su alocución, y nos salvamos de escuchar más comentarios porque hace unos días Central, de San José, quedó eliminado; si no, todavía estaríamos hablando de ese equipo.
Es claro que el Estado no tiene que inmiscuirse en el fútbol, a pesar de que en nuestro país –tal vez un poco por la pasión que tenemos– sobran ejemplos de diferentes gobernantes que no han resistido la tentación de poner presidentes, sacar presidentes e incidir en no dejar subir a alguien, y esto ha atravesado a todos los partidos políticos. Pero cuando estábamos en la AUF, realmente no entendíamos por qué ese enfrentamiento entre el fútbol capitalino y el del interior. Sin lugar a dudas, este fue, es y seguirá siendo solo por intereses económicos.
Hoy, afortunadamente, no por convencimiento sino por oposición, la OFI va a tener su lugar en la Asociación Uruguaya de Fútbol. En este sentido, tendríamos que preguntarnos qué podemos hacer y en qué podemos colaborar desde nuestros lugares. Planteo esto porque, si bien no tenemos que meternos en el fútbol, aquí hay no menos de seis, siete u ocho ex-intendentes –entre los que me incluyo– que podrán atestiguar las veces que usamos las estructuras del fútbol del interior para poder llegar a la gente con políticas sociales. ¿Cuántas veces lo hicimos? Y lo hacíamos de esa forma porque no teníamos otra opción, ya fuera porque no teníamos dónde abrir un merendero o una policlínica, o dónde conseguir gente que muchas veces oficiara de psicólogo para hacerles frente a los problemas de la droga.
Casualmente, en el día de ayer estuvimos reunidos con representantes de la Organización Nacional de Fútbol Infantil –ONFI–, que mueve a 70.000 niños por fin de semana, y dicen que son 270.000 personas. Pero hete aquí que, no digo la mayoría, pero sí muchos clubes de la OFI tienen su base en la Organización Nacional de Fútbol Infantil. Ayer nos comprometíamos con la gente de la ONFI a tratar de colaborar, desde este recinto, con algunas cosas, de la misma forma en que se han institucionalizado diferentes semanas, como la Semana del Corazón y demás. En este sentido, dentro de dos años se celebra una fecha importante para la ONFI y queríamos institucionalizar la semana del fútbol infantil, allá por el mes de octubre. Los señores senadores preguntarán por qué razón. Me alegro de haber escuchado al señor Senador Pardiñas hacer referencia a una de las tantas leyes que existen en este país, que son preciosas, pero que no se aplican. Sin duda, luego de haberlo escuchado, estoy seguro de que aquí estaremos convencidos de que debemos dar contenido a esa ley que persiguió un fin muy loable, y empezar a avanzar en cosas como las que mencionaba el señor senador Camy: que los clubes no tengan que pagar tarifa comercial de luz ni de agua, que si alguien cometió vandalismo en la entrada de agua del predio de un club de baby fútbol por lo que este haya pasado a deber $ 200.000, no le corten el servicio, etcétera. Este no es solamente un tema económico; estoy convencido de que nosotros, como políticos, como gobernantes, tenemos que usar este tipo de estructuras para poder llegar mejor a la gente con una cantidad de definiciones políticas que el Poder Ejecutivo quiere llevar a cabo y que no sabe cómo concretarlas.
Ya ponía el ejemplo, ¿no serán la ONFI y la OFI buenos vehículos para instrumentar una política de salud bucal? ¿No serán estas estructuras deportivas buenos vehículos para empezar a prevenir problemas de alcoholismo y drogadicción en la edad a la que corresponde hacerlo? Yo creo que sí.
Celebro estar aquí –supliendo al señor Senador Lacalle Pou, y estoy seguro de que él comparte esto– porque he escuchado el compromiso de todos los partidos políticos para empezar a dar contenido a una ley preciosa, pero que hasta ahora no se ha aplicado. ¡Y ojalá que la celebración de estos setenta años de la OFI y los próximos festejos de la ONFI sean el punto de partida para que el sector político dé una mano en algo que creo que lo merece!
Aquí se han nombrado aspectos que hay que mejorar. Recuerdo que el Negro Lescano trató de avanzar en la ley relativa al mecenazgo deportivo, que en mi opinión quedó renga; no ha sido lo suficientemente atractiva como para tener el efecto que debería tener en las estructuras deportivas.
Por todo lo expuesto, señor Presidente, nos sumamos al festejo. Les damos un apretado abrazo y les deseamos mucha suerte en esta nueva etapa en la Asociación Uruguaya de Fútbol, que no va a ser sencilla. Ojalá que el tiempo no se lleve las intenciones que hoy han quedado demostradas aquí para poder ayudar a la OFI, al fútbol infantil y a tantas otras organizaciones, hoy desconocidas, que lo único que hacen es tratar de aportar su granito de arena para que los uruguayos vivan cada vez mejor. Lo más increíble es que todas estas organizaciones tienen un efecto más importante en la clase social que más lo necesita.
Por eso quiero, simplemente, saludarlos y felicitarlos. Nos ponemos a las órdenes para trabajar y para lograr que estas palabras no queden solo en la versión taquigráfica, sino que también podamos concretarlas.
Un abrazo grande.
(Aplausos en la sala y en la barra).
SEÑOR CAMY.- Pido la palabra.
SEÑOR PRESIDENTE.- Tiene la palabra el señor Senador.
SEÑOR CAMY.- Señor Presidente: quiero presentar dos mociones.
En primer lugar, solicito que la versión taquigráfica de las palabas vertidas en esta sesión pase a conocimiento del Consejo Ejecutivo de la OFI, a las sesenta y una ligas y a las cuatro confederaciones que integran la organización, y a las dieciocho comisiones de deportes de las juntas departamentales de los departamentos que integran la OFI.
En segundo término, solicito un cuarto intermedio de diez minutos –esto ya ha sido acordado en la reunión de coordinación– para concurrir a la antesala del Senado, donde la Dirección Nacional de Correos va a anunciar el lanzamiento de un matasellos conmemorando los setenta años de la OFI.
SEÑOR PRESIDENTE.- Se va a votar la primera moción propuesta por el señor senador Camy, relacionada con el envío de la versión taquigráfica a los organismos mencionados.
(Se vota).
–26 en 26. Afirmativa. UNANIMIDAD.
La Mesa agradece a los directivos de la OFI y a los representantes que nos han honrado con su presencia, y les desea un feliz aniversario en el día de mañana.
Se va a votar la segunda moción presentada por el señor senador Camy para pasar a cuarto intermedio por el término de diez minutos.
(Se vota).
–26 en 26. Afirmativa. UNANIMIDAD.
El Senado pasa a cuarto intermedio por diez minutos.
(Así se hace. Son las 11:06).
(Vueltos a sala).
–Habiendo número, continúa la sesión.
(Son las 11:41).